Lo que el legislador quiso decir

Quien ha vivido una experiencia, al participar en un juicio ante los tribunales de justicia, habrán visto argumentos del juez o de los litigantes, un aforismo “lo que el legislador quiso decir”, lo anterior hoy día, todavía sigue utilizándose con frecuencia; (ya no debe usarse con el mismo significado) este tecnicismo, se entendía, que todos los que acudieran a un tribunal a resolver un conflicto, tenían que aplicar la ley tal y como está, y más aún, tratar de interpretar el pensamiento del diputado, de ahí la oración de “lo que el legislador quiso decir” se trataba, pues, de buscar cuál fue la verdadera intención de los diputados o senadores cuando se hizo la norma, sin más ni menos que eso.

 

Y que de raro tiene, como dice la canción, que así se aplicaría la ley, ya que finalmente, ésta, se hace para que se cumpla y ¿quien la hace? es el que comúnmente nosotros conocemos como diputado o senador; imagínese, si la ley era hecha por un diputado sensato, probo, honesto, conocedor de la materia y con toda la intención de beneficiar a la sociedad; pues estaba bien hecho; pero si fuera todo lo contrario, -que existen muchos casos- la ley, causaba injusticias, sin embargo el juez y los abogados tenían que aplicarla, porque esa fue la voluntad del legislador, absurdo ¿no?.

 

Ahora, con el nuevo sistema de justicia, que tenemos en México y que podemos aplicar, desde hace seis años y medio (reforma constitucional del 10 de junio de 2011 D.O.F.)  dicha oración, puede ser aplicada o no, esto depende ahora de los abogados litigantes y del juez; se tiene que analizar, si el diputado o senador al momento de hacerla, la creó correctamente, si el congresista cuidó que la ley no fuera a contravenir a la Constitución o a tratados internacionales; pues ellos también están obligados a respetar los derechos de la sociedad, además cuando se hace una ley, en el Congreso tienen que ser cuidadosos de no hacer normas al garete y menos, incluir su pensamiento personal sin sentido, deben demostrar ser responsables y hacer leyes apegadas a la Constitución y no deben dar pauta, para violar derechos humanos de nadie, si lo hace, el juez ya no debe utilizar este aforismo, nada más absurdo que tener que un juez se someta a la voluntad de legislador y que esa voluntad fuera injusta, ya estamos en otros tiempos, donde un tribunal debe someter a prueba lo que un congreso legisle.

 

Sin duda, quien hace una ley, (diputados y senadores) ya no tienen la última palabra, eso de que hay que aplicar la voluntad del legislador ha sido reducido a un estudio de razonabilidad, si se equivocó al hacer una ley con motivos injustos, el juez no debe hacer caso a ese pensamiento y no aplicar dicho aforismo, los jueces y autoridades, solo están para hacer justicia, aun por encima de una ley, pero nunca una ley o la voluntad del legislador irá en contra de la constitución.

 

 

15 de marzo de 2018

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